Casa nueva, vida nueva

Dicen por ahí con uno de esos refranes que: el casado casa quiere.
Desde que llegamos a Chile esa era nuestra meta, tuvimos la buena oportunidad para comenzar de llegar a casa de mis padres mientras las cosas comenzaban a caminar y nos establecíamos. 
Con el correr de los meses pensamos muchas veces qué haríamos... En un momento un arrendatario de una casa de mi papá decide irse, nos ofrecieron ocuparla. Fuimos a verla... le encontramos mucho potencial. Una casa de un piso, no muy grande, no muy pequeña, pero de tamaño justo para nosotros tres.
Cuando el arrendatario se fue, entramos nosotros con la idea de una renovación basada en una remodelación de esta casa antigua para ponerla un poco más moderna y ajustada a nuestra idea de hogar.
En estos tiempos modernos los baños son mucho más importantes que antes. Antes diseñaban la casa con un solo baño, una sola ducha para toda una familia, también para las visitas y por lo tanto el baño se encontraba normalmente cerca de las áreas sociales. Hoy eso es poco funcional. 
Ya después de mucho material, cerámicas, cemento, ideas renovadoras, dedicación en escoger los colores, ponerle el cariño y el gusto a lo que pronto será tu hogar es un tiempo exquisito en el que se comparte y se funden las ideas de la familia. Gracias a Dios teníamos la parte económica para llevar a cabo la mayoría de nuestros deseos de renovación.
A partir del viernes pasado ya nos mudamos. Llegamos a nuestra casa. A la casa que con todo el amor hemos dedicado a poner a nuestro gusto. Estamos felices. Camila tiene su habitación con baño propio. Y por si fuera poco ya tenemos nuestra mascota, un pastor alemán de 4 meses, se llama Pochoco.
Esperamos con Dios delante tener mucha dicha en nuestro hogar.
Estamos agradecidos infinitamente por ese empujón inicial que nos dieron mis padres, sin ellos no estuviésemos donde estamos ahora.

Dientes de leche

Difícilmente recuerdo cuándo fue que se me cayeron los dientes de leche, pero estaba contenta porque los dejaría uno a uno bajo la almohada esperando al "ratoncito" que se los lleva y me dejaba una moneda.
Recuerdo una vez en el colegio mientras me columpiaba en el patio, se me cayó el diente que estaba colgando de una fibra en mi encía... se cayó y me bajé rápido del columpio para buscarlo en el piso de tierra y piedrecillas, no lo encontré. Me dio pena porque perdía con eso mi oportunidad de ganar una moneda o un chocolate. Me fui a casa, cabizbaja. Cuando llegué me quité el uniforme del colegio y zás lo encontré, encontré el diente que se me había perdido, había caído mágicamente en el bolsillo de la blusa de mi ropa, así que al final obtuve mi "recompensa".
Ayer estaba con Camila (que ya tiene para esta fecha 5 años y 3 meses) y de pronto nos dimos cuenta de que tiene dos dientes sueltos en la encía inferior, justo los dos dientes del frente, justo los dos primeros dientes que le salieron, como si estuviese todo planificado, serán los primeros en caer habiendo sido los primeros en salir.
Camila se puso feliz, con sus dientes sueltos reía y saltaba, cantaba: "que se caigan, que se caigan" y yo tuve un momento de pensar en que no quería que se le cayeran, no quería que mi niña siga a la siguiente etapa. Al parecer esto es muy de las madres que queremos que siempre nuestros hijos sigan siendo niños. Yo le manifesté a ella que no quería que se le comenzaran a caer los dientes, ella me dijo: "Mami, tengo que crecer!"
Pensé en todas las cosas que pasarían después, todo lo que me pasó a mí lo recordé, cuando no quería reír porque tenía un gran ventanal en mi boca y sin embargo todos se reían de mí diciendo: "vieja sin dientes" (vieja teniendo menos de dos dígitos de edad). Creo que tendré que hablar con ella para que sepa que crecer no es siempre acerca de la recompensa de poner un diente bajo la almohada. Crecer se trata de una vivencia, de un cambio, de aprender a afrontar el cambio, de adquirir responsabilidades, de avanzar, de enfrentarse a la vida con un hueco en la boca y aún saber que somos personas buenas aunque todos los demás se burlen. 
Definitivamente con este cambio de etapa me siento y estoy más vieja, pero lo que importa es que sigo siendo feliz.

Palabras que nunca hubiese querido escuchar

Dentro de las palabras que nunca que me hubiese gustado escuchar están:

Boko Haram
Secuestros
Tortura
Guerra
Hamas
Netanyahu
Misil
Avión derribado
Rencor
Chantaje
Odio
Matanza
Niños desamparados
Gente en situación de "calle"

Quisiera que ninguna de estas palabras tuviesen hoy un significado en el presente. Ojalá solo hubiesen sido palabras aprendidas en los libros de historia antigua... Pero hoy, todas ellas tienen un presente y ocupan todos los canales de noticias... Espero nunca tener que enseñarle a mi hija el significado de estas palabras... Tenemos suerte de haber nacido en un país (dentro de todo) pacífico, lejos de tener que aprender desde niños acerca de bombardeos, armas, dolor y muerte.
Dios cuide a cada una de esas personas que hoy les toca vivir en un lugar de conflicto.

Cannabis

Me aburre el tema de las drogas, muchos políticos se sientan en los sillones más caros de las cámaras de diputados y senadores a hablar acerca de legalizar o no legalizar el consumo de marihuana en Chile. Si despenalizar el auto-cultivo. 
Me aburre porque, yo que solo la probé una vez, y no le hallé ningún brillo, ni me divertí, ni me marcó, ni aluciné, nada! Mejor así! No le encuentras el gusto a algo que te traerá problemas en algún lugar de tu cuerpo tarde o temprano, si no es por andar buscando proveedores, será porque las neuronas que mueren te dejan menos para pensar, o porque con el tufo de la marihuana molestarás a alguien.
Me aburre porque cada día hay más consumidores y porque estos políticos discuten a mi humilde entender, el punto equivocado. Quieren restarle importancia al narcotráfico, pero no se dedican a trabajar para bajar la cantidad de gente que consume. No se dedican a erradicar la droga desde tempranas edades en "los sitios más vulnerables" como ellos llaman elegantemente a las poblaciones de escasos recursos, pocas oportunidades y poca educación. No se dedican a intensificar una fiscalización en las grandes construcciones donde los trabajadores a medio día fuman su "cambumbo" a olor y paciencia de todos los transeúntes. El trabajador de construcción, requiere sus sentidos totalmente alertas sobretodo cuando trabajan en altura, pero yo diría que el 80% se fuma su yerba (o la del compañero) a la hora de almuerzo y también saliendo del trabajo, cosa que me parece extremadamente peligrosa.
Me aburre la yerba porque el mismo trabajador que se sube al transporte público PASADO a marihuana, sube por la puerta trasera, evadiendo el pago del pasaje, pero sí tiene dinero para pagar la jodida yerba.
Si usted fuma, allá usted, no quiero convencer ni dedicarle estas palabras a nadie, pero fumar yerba no te hace mejor ni peor que nadie. Si no fuma... ojalá nunca lo haga, y si lo hace ojalá que sea tan mala como la que yo probé para que no siga con la "probadera". 

El himno

Mientras viví en República Dominicana tuve varias ocasiones de escuchar el himno nacional Dominicano, en el estadio de béisbol más que nada, y me parecía un himno muy bonito, la música muy agradable y la letra muy linda también.


En Chile la ocasión de cantar el himno normalmente era en la escuela todos los días lunes mientras se izaba la bandera.

Este año también fue el cambio de mando presidencial, Piñera le entregó la banda presidencial a Bachellet, y mi trabajo está justo a un costado del palacio presidencial La Moneda, así que cuando fue el primer discurso oficial de la presidenta lo vi en vivo y en directo desde la ventana. Se cantó por supuesto el himno también. Eso me invitó a reflexionar que no le había enseñado el himno a mi hija... Tampoco le enseñé allá el himno Dominicano, me lo propuse como una tarea pendiente, porque recuerdo que cuando tenía cerca de 4 años yo cantaba el himno y analizaba la letra, y por supuesto me extrañaba de algunas palabras que no conocía y las cambiaba por las que yo entendía que eran las correctas. Todavía se ríen de mí en casa cuando lo recuerdan. Por ejemplo: La parte en que dice "Dulce patria, recibe los votos", yo no conocía la palabras votos, pero sin embargo, conocía la palabra "bototos" (se les dice así a las botas cortas, de caña media). Entonces yo cantaba "Dulce patria, recibe los bototos" (cosa que no estaba tan lejos de la realidad puesto que el en esa época estaba Pinochet en el gobierno recién instaurado el gobierno militar, por lo tanto muchos bototos militares)

También el mundial de fútbol que se juega por estos días en Brasil, es un gran medio para acercar a cualquier persona a sus colores. El día del partido de Chile con Australia lo vimos con Camila en casa, y mientras los jugadores entonaban el himno ella también entonaba algunas frases. Al parecer en el colegio se me adelantaron en la tarea de enseñarle el himno, pero me queda pendiente el himno Dominicano, ella como chilena y dominicana debería conocerlos a ambos.

El himno chileno, cantado en el estadio Maracaná el miércoles 18 de junio 2014, más de 40mil voces unidas por un mismo sentimiento patriótico reventaron y aún crispan la piel cuando lo escucho. Como anécdota: En el partido con España (del vídeo) primero sonó el himno de España, todos en la oficina (a la hora del partido estábamos frente a la televisión con permiso del jefe para poder disfrutar del encuentro) ignorantes al fin, cuando vimos que los españoles no cantaban el himno español, dijimos "aaaahhh van a perder, no cantan!". Vino el himno chileno y realmente sobrecogedor la emoción con que cantaban jugadores y espectadores y cantaron con el alma... Luego, investigando resulta que el himno español no tiene letra... difícil cantar un himno sin letra no? 

¡¡¡Vamos Chile!!! ¡¡¡Lleguemos hasta donde se pueda en este mundial, con alegría y entusiasmo!!!

Costurero

Para ser mamá aparte de hacer muchas cosas relacionadas a limpieza y alimentación también debemos hacer cosas manuales, y saber coser es importante.
Porque el día que le regalaron el vestido de princesa a mi hija, tuve que hacerle la basta porque le quedaba un poquito largo, y esa niña miraba cada puntada que yo daba, y preguntaba si faltaba mucho jajaja
En alguna época enhebraba el aguja de un solo intento... hoy aunque mi vista sigue siendo 20-20 prefiero usar agujas para ciegos y no pasar vergüenzas jaja
Como pronto iré a vivir a la casa que estamos remodelando, me he propuesto tener mi propio costurero con las cosas necesarias. El otro día compré muchas agujas (siempre se pierden), una cinta de medir, hilo rosado (apropiado para vestidos de princesa), hilo celeste (para el otro vestido de princesa). Hoy compré hilo blanco y negro (para el ying y el yang jajaja) y azul marino (para todo lo que tenga que ver con colegio).
De a poco iré armando mi costurero, para mi nueva casa. 
Hoy que Camila es un poco más grande, cuando me ve cosiendo me dice "mami no te vayas a pinchar"... 

La primera

Me ha tocado estos días ser la primera... la primera compra para mí (o venta para el vendedor) en dos ocasiones.
El otro día bajé a comprar unas manzanas porque estoy a dieta, mi doctora me envió dieta de esas que retuercen las tripas muy rigurosa y bueno, entre las cosas que sí puedo comer son dos frutas al día, cosa que puse de merienda porque no aguantaba entre el desayuno y el almuerzo a llegar sin desfallecer. En fin, bajé por las manzanas y le di el billete a la señora que atendía por dos manzanas y ella tomó el billete, dijo algo así como "ah la primera entrada del día, bendito sea el Señor, que sea de provecho para todos"... Parecía como la oración a la primera venta del día. No sé si está bien mezclar a Dios con esto, pero dar gracias por una venta no está mal tampoco.
Hoy me pasó nuevamente, bajé por las manzanas pero la señora de esa tienda no estaba, así que seguí un poco más allá hasta el kiosko de las frutas, y le pregunté al señor que atendía (que recién se estaba instalando, parece que bajé muy temprano!) por las manzanas y me las mostró en un cajón dándome el precio, tomé dos y le pagué, y también dijo algo así como "la primera venta del día, que ojalá traiga mucha suerte para todos" y yo me sonreí y asentí.
Me volví al trabajo sonriendo, no sé, me pareció divertido que dos días yo también sea parte de este ritual que al parecer es común en las personas que venden (si un día me animo le preguntaré al señor de la fruta).
Comentando con una amiga me dice que también los señores de la feria donde ella compra hacen lo mismo porque ella va bien tempranito a esos menesteres... ¿Les ha pasado esto?