Tuesday, January 16, 2007

Puntos de referencia...

Siguiendo con el libro...

" El ser humano necesita de puntos de referencia en su vida para continuar viviendo. Generalmente nuestro estilo de vida es el resultado de referencias de nuestro pasado y de la manera como las programamos. Cuando buscamos estar con alguien, generalmente elegimos a la persona que corresponde a nuestro modelo de valores, sentimientos y comportamientos. Cuando queremos que alguien se comunique con nosotros, necesitamos darle referencias tales como el número de teléfono, la dirección, a qué hora podrán encontrarnos.
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Y en el caso del amor, las personas se sienten 'amables' cuando alguien les sonríe, rechazadas cuando alguien las critica, interesantes cuando coquetean con ellas. Es decir, ponen sus puntos de referencia fuera de sí mismas, a partir de las reacciones de los demás.
Lo ideal con respecto al amor es que busquemos nuestros puntos de referencia dentro de nosotros mismos. Si no, cada vez que la persona que amamos llegue tarde nos sentiremos abandonados.
Para sentirnos confiados, seguros, tranquilos, con deseos de divertirnos y amar, es fundamental que estos sentimientos existan dentro de nosotros; que sean nuestros, independientemente de cualquier otra persona. Éste y muchos otros sentimientos son nuestros puntos de referencia internos, que nos posibilitan estar satisfechos y sentir paz y felicidad en el momento en que estemos solos. De esta manera, nos volvemos responsables de nosotros mismos y de nuestros actos. Y, así, estamos listos para encontrar una pareja y estructurar una relación sana, efectuando los cambios que fueren necesarios para el crecimiento del amor y de la pareja. Siempre llevamos esos puntos con nosotros a cualquier lugar a donde vayamos.
Pero, normalmente, ponemos los puntos de referencia por fuera de nosotros mismos. Cuando sólo sentimos confianza si hay alguien cerca, si es la presencia del otro lo que produce tranquilidad, cuando la percepción de que nuestra paz y nuestra felicidad emanan de la otra persona, si nuestra diversión depende del humor de la otra persona, en fin, cuando dependemos del comportamiento, de las respuestas, de la aceptación, del humor, de la compañía del otro para estar bien, es señal de que nuestros más fuertes puntos de referencia están localizados fuera de nosotros, están en otra persona. Entonces, esas personas en las que depositamos nuestros puntos de referencia, pasan a tener mucho poder sobre nosotros.
Es importante la conciencia de que, cuando ponemos nuestros puntos de referencia dentro de nosotros mismos, los llevamos hacia donde vamos, siempre estamos en contacto con ellos y siempre podemos utlizarlos, a cualquier hora que los necesitemos. Pero cuando los puntos de referencia están colocados en otras personas, cuando ellas cambian de espacio, posición o lugar, esto es suficiente para provocarnos enseguridad, desorden y hasta desespero. Queda el sentimiento de que no se puede vivir sin la otra persona. Y pensar que nuestra vida depende de otra persona es una gran mentira.
Cuando se rompe una relación, el que ama sufrirá mucho, y es saludable que sufra. Llorará mientras duren la tristeza y la nostalgia, pasará muchos malos momentos, porque está perdiendo a la persona amada, y esto es muy duro. Pero transcurrido algún tiempo, retornará a sus puntos de referencia y volverá a comenzar todo. No ocurre lo mismo con la persona que pone los puntos de referencia fuera de sí misma. La mayoría de las veces, cuando rompe una relación de amor, no sufrirá solo el dolor de la pérdida de la pérdida del amado, sino que se desesperará por la pérdida de las propias referencias. Y esto, en algunos casos, podrá tener graves consecuencias.
Quedará con la sensación que tiene quien al regresar a casa, se da cuenta de que se le olvidó la dirección y no hay nadie cerca para preguntarle.
Por más confianza que alguien tenga en sí mismo, habrá momentos en que necesitará un confidente para compartir determinada situación. Al confiar en una persona estamos poniendo en ella un punto de referencia externo de confianza.
Si nos amamos, nuestro punto de rederencia interno de amor nos ayudará a amar a alguien, y así se establecen dos puntos de referencia para el amor. Uno dentro de nosotros, y otro en la persona que amamos. Y si por algún motivo perdemos esa referencia externa, si esa relación se rompe, sabemos que sufriremos, pero nuestro punto de referencia de amor interno nos llevará a encontrar otro amor.
Si usted tiene apenas un amigo y pone todo su punto de referencia de amistar en él, terminará sofocándose, y se sentirá muy amenazada siempre que él se mueva por fuera de su control, o de su puesto de observación.
Si alguien sabe amarse a sí mismo sabrá amar bien al otro.
Si no sabe, amará al otro como a sí mismo: mal."


Muy bien... espero que haya servido para algo esta lectura... alguna vez me enseñaron a la mala que no debo dedicarme tanto al otro, sino que debo ponerme a mi misma antes que nadie, y esto puede confundirse con "egoísmo" pero no lo es, porque estoy convencida de que la única mano que está siempre para ayudarte, aparte de la de Dios, es aquella que está al final de tu propio brazo...

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