Manjar

¡Qué delicia!
¡Cuántos recuerdos de niñez!
Es el nunca bien ponderado Manjar o Dulce de Leche... añorado por los amantes del dulce... untado en panes, o simplemente comerlo a cucharadas era una bendición.
Antes lo hacíamos así como está en la foto... y mucho antes hervían la leche de vaca con azúcar hasta hacer el manjar... pero después las cosas se fueron simplificando para uno y ya aparecían los tarros de manjar hechos de tarros de leche condensada... claro!!! hoy en día es más fácil aún... en los supermercados en Chile lo consigues en bolsitas de un kilo, de medio kilo, de 200gr, en envases desechables de 250gr y de 500gr... de todas las marcas... con su sello personal cada una... pero nunca igualarán al manjar de tarro...
¿Cómo hacerlo? Hay que tener un poco de paciencia y ya... una olla, agua disponible y gas en el tanque.
Hervir los tarros de leche condensada sin la etiqueta y bien lavados para que el pegote de la etiqueta no inutilice para siempre la olla en la que los vamos a hervir.
El secreto está en mantener la olla siempre tapada y con el agua hirviendo que tape siempre los tarros (para esto se necesita la paciencia, para ir rellenando la olla con el agua hirviendo) y eso hacerlos hervir por tiempo de dos horas a fuego medio bajo.
Una vez que ha pasado el tiempo de cocción, los tarros deben quedar sumergidos en el agua hasta que se enfríen...
Un poco de paciencia no hace mal cuando esperamos por una cosa tan divina como esta... para hacer panqueques (ver BNB 2007) o cualquier cosa que sea dulce... una maravilla!!!
¿Se animan?

(Li, te llevo el tuyo escondido en la maleta... ya veremos ricas otras formas de probarlo uuuuyyy! jeje)